El sector del agua urbana en España se enfrenta en la actualidad a un conjunto de retos con la suficiente entidad como para generar un profundo debate acerca de la necesidad de reformar el marco regulatorio y de gestión actual.
Estos retos pueden ser clasificados en: medioambientales, donde España se caracteriza por ser uno de los países europeos con mayor escasez de agua, hecho que se refleja en su alto estrés hídrico; económicos; y estructurales, en los que comparando tanto el marco regulatorio como el modelo de gestión del sector de la distribución y saneamiento de agua urbana en España con el existente en otros países de la OCDE se identifican algunas áreas de mejora.
Así, los retos actuales del agua urbana en España, según el informe "La gestión del agua en España. Análisis y retos del ciclo urbano del agua" de PWC, se pueden resumir en:
Medioambientales:
- Elevado estrés hídrico.
- Desertización.
- Elevado nivel de pérdidas de agua.
- Incumplimiento de la directiva de calidad de depuración.
Económicos:
- Escasez de inversión.
- Elevado nivel de O&M.
- Obsolescencia en la red.
- Escasa inversión privada.
Estructurales:
- Complejidad administrativa.
- Mercado carente de unidad.
- Dispersión de cánones.
- Dispersión de tarifas.
- Vulnerabilidad del consumidor.
- Falta de recuperación de costes,
- Opacidad y ausencia de información.