"El agua se ha de ver como el conector principal para conseguir los objetivos de las agendas"

Global Omnium ha sido una empresa pionera en la apuesta por la inversión en I+D+i en la gestión de los recursos hídricos, contando a día de hoy con un robusto y prometedor Departamento de Innovación liderado por María Ángeles Serrano. En esta entrevista, conocemos los pilares y estrategias de un equipo humano de más de cuarenta profesionales, que en tan solo dos años ha movilizado un presupuesto de más de veinticinco millones de euros.

María Ángeles Serrano es la nueva Directora de Innovación de Global Omnium, tras haber desempeñado diferentes funciones, atesorando una gran experiencia y conocimiento del sector del agua. Matemática, experta en TIC y en Gestión y Control de Calidad e Innovación, pilota una de las divisiones más estratégicas con un equipo humano de más de cuarenta profesionales y un presupuesto solo en dos años de más de veinticinco millones de euros. Para Serrano, «el futuro se ha de orientar a desarrollar soluciones que garanticen el suministro de agua en calidad y cantidad para la prosperidad económica y la preservación de los ecosistemas. En este sentido, cobran especial relevancia las TIC.  La digitalización del sector es fundamental para asignar recursos en función de los usos y en ese sentido el PERTE para la Digitalización del ciclo integral del agua, es elemento clave, promoviendo la colaboración e innovación en el sector». En este sentido, Global Omnium liderará dos proyectos financiados por el PERTE —ShineAMV y DigitAMED—, fomentando el desarrollo tecnológico y las alianzas en el sector para afrontar los desafíos venideros.

Pregunta: En primer lugar, su trayectoria profesional está estrechamente ligada a la innovación. ¿Cómo se gestó esta vocación? ¿Cómo aterrizó en el ámbito del agua?

Respuesta: Mi formación como matemática me llevó a iniciarme profesionalmente en el sector TIC, un campo que me resultaba apasionante por lo que podía ofrecer en el ámbito de la gestión y eficiencia de los procesos. Así, desde el inicio de mi carrera, trabajé en proyectos tecnológicos aplicados al ámbito industrial y de servicios.

"En 2009, la apuesta por la telelectura de contadores sentó las bases para nuestra spin-off tecnológica, IDRICA, y su plataforma go-aigua"

Mi enfoque en eficiencia y mejora continua me llevó posteriormente a formarme y especializarme en Gestión y Control de Calidad, dándome la oportunidad en ese momento de entrar en contacto con el sector del agua, al unirme al Dpto. de Calidad del Grupo Aguas de Valencia (ahora Global Omnium). Tras unos años como responsable del Sistema de Gestión de Calidad, participé en la implantación del Sistema de Gestión de I+D+i en el Grupo, asumiendo posteriormente la responsabilidad del nuevo Departamento de I+D+i creado para promover y coordinar la actividad de Innovación de la compañía.

Cada uno de estos pasos, y en esos momentos concretos, me han permitido avanzar en el ámbito de la Innovación, proporcionándome una perspectiva amplia de la importancia de las TIC, la búsqueda de la mejora continua en los procesos, y la relevancia de la innovación en el sector del agua, donde tanto tecnología como sostenibilidad son fundamentales para afrontar los desafíos presentes y futuros.

P.- Comenzó a trabajar en Global Omnium hace diecisiete años. A lo largo de esta prolongada experiencia, ¿cómo describiría la evolución de la compañía en investigación e innovación hasta ahora? ¿Qué hitos destacaría en el recorrido de la empresa?

R.- Creo que la mejor manera de exponer la visión y el giro transformador que emprendimos en este sentido ya lo expuso Jaime Castillo cuando aseguró “En Global Omnium se optó por la transformación digital y la innovación […] cuando términos como ‘start up’, ‘IoT’, ‘Innovación abierta’, o ‘Big Data’ no existían”. La implicación y el compromiso desde la alta dirección, marcando un camino claro hacia la tecnología y una clara apuesta hacia la investigación e innovación, ha sido muy significativa en los últimos años. Así lo demuestran los indicadores de I+D+i en cuanto a inversión, presupuesto, proyectos en cartera, proyectos europeos, en cooperación o liderados, entre otros.

En esta evolución podría remarcar diversos momentos que muestran de manera clara cuál ha sido nuestra visión desde origen y hacia donde queríamos orientar nuestra actividad innovadora. En 2009, la apuesta por la telelectura de contadores sentó las bases para nuestra spin-off tecnológica, IDRICA, y su plataforma go-aigua.

Otro momento relevante, fue obtener apoyo de la Comisión Europea a través del Programa LIFE para el proyecto LIFE ECODIGESTION, primer proyecto europeo liderado desde Global Omnium más de diez años atrás, marcando nuestro compromiso con la economía circular, la promoción de las energías renovables y la descarbonización ya en esos momentos.

En un hito reciente, el desarrollo del sistema innovador SarsGOAnalytics al comienzo de la pandemia de COVID-19 posibilitó la detección temprana de rastros del virus en aguas residuales. Esta pronta respuesta fue el resultado de una investigación que se había iniciado tres años atrás, enfocada en la detección de virus en aguas residuales. Una vez más, nuestra visión innovadora nos permitió anticiparnos a los desafíos emergentes.

En definitiva, la evolución de la compañía es el resultado de decisiones totalmente dirigidas y orientadas a la mejora constante de los servicios mediante la innovación, analizando el contexto actual y futuro en cada momento, para avanzarnos a los nuevos retos en la gestión del agua.

P.- ¿Cuál es la misión y los objetivos principales del Área de Innovación de Global Omnium?

R.- Tenemos el compromiso de impulsar el progreso y la sostenibilidad en la gestión de los recursos hídricos, promoviendo el desarrollo de soluciones innovadoras para garantizar la salud presente y futura de las personas, un uso eficiente y sostenible de los recursos, la conservación del medioambiente y su biodiversidad, así como la resiliencia de los ecosistemas ante los impactos del cambio climático.

Estos esfuerzos se canalizan en cinco retos: La calidad del agua, buscando tecnologías innovadoras que la garanticen, no solo para la salud humana, sino también para la salud animal y la conservación de los ecosistemas. La eficiencia en el uso de recursos, enfocando soluciones innovadoras que permitan su uso eficiente, así como una distribución óptima en el conjunto de los sectores económicos. La economía circular, impulsando nuevas formas de tratamiento y reutilización del agua, así como la valorización de residuos, generando modelos de negocio sostenibles y promoviendo la simbiosis industrial. Frente al cambio climático, protegiendo y adaptando los recursos ante fenómenos extremos, al tiempo que desarrollamos soluciones para descarbonizar procesos. Y finalmente, la conservación de la biodiversidad y los ecosistemas, promoviendo tecnologías que eviten su deterioro.

Para ello, activamos cinco palancas como la mejora continua de procesos, la generación de nuevos procesos, el entendimiento del nexo agua-energía-alimentación-ecosistemas, la cooperación Público-Privada y la digitalización.

Todo ello fundamentado en los cinco pilares de nuestra estrategia de innovación, que son: El desarrollo de nuevas tecnologías para promover la sostenibilidad; La creación de alianzas tecnológicas con organismos de investigación; El aprovechamiento y fortalecimiento de las capacidades del personal; La cooperación con los agentes sectoriales; Y el fomento y la promoción de iniciativas para el desarrollo tecnológico del sector.

P.- ¿Cómo se estructura el organigrama para la Gestión de la Innovación en Global Omnium? ¿Qué destacaría de su equipo humano?

R.- Global Omnium apuesta por una estructura descentralizada que despierta el potencial innovador de toda la organización, siguiendo la norma UNE 166.002 para su Sistema de Gestión de I+D+i, el Departamento de Innovación Central actúa como vínculo y coordinador entre los equipos técnicos de I+D+i en cada área de la empresa. Estos grupos promueven la generación de ideas, contribuyen a la sostenibilidad de la actividad de innovación y participan en el desarrollo de los proyectos, contribuyendo al avance tecnológico de los servicios de la empresa.

El capital humano con el que contamos en nuestras estructuras de innovación es nuestro activo más valioso, permitiéndonos avanzar hacia nuestros objetivos con seguridad y determinación.

P.- El sector del agua está atravesando un momento histórico, tanto por los avances tecnológicos y digitales, como por encontrarnos en un escenario de incertidumbre sin precedentes respecto a la disponibilidad futura de recursos hídricos. ¿Cuál es el rol de la I+D+i en esta coyuntura?

R.- Nos encontramos en un momento importante para el sector. El enfoque hacia la twin transition marcada desde Europa (verde y digital) para conseguir los objetivos de sostenibilidad no es posible sin la transición hídrica hacia un uso seguro del agua, entendiendo seguro en cantidad como en calidad.

La I+D+i se convierte en una herramienta crucial para abordar estos desafíos, permitiéndonos comprender mejor los procesos, la evolución de la calidad del agua, así como las amenazas ambientales, para desarrollar nuevas tecnologías y soluciones que aumenten la eficiencia en la gestión del agua y mejoren la sostenibilidad.

Desde nuestra perspectiva, estos retos han de abordarse mediante el fomento de ecosistemas de innovación que nos permitan el desarrollo de soluciones que aporten valor compartido para la sociedad civil, las empresas, la academia y la administración.

En ese sentido, en el ámbito europeo, iniciativas como Water4All en la que Global Omnium participa a través de la PTEA (Plataforma Tecnológica Española del Agua) ejemplifican la colaboración público-privada, aprovechando la investigación científica, la participación sectorial y la contribución privada para desarrollar soluciones viables en el mercado, con el respaldo de la administración.

"La I+D+i, respaldada por un sólido ecosistema de innovación, fortalece la resiliencia y nos prepara para escenarios de incertidumbre futuros"

En España, también se percibe como la Administración apuesta por procesos de Compra Pública de Innovación, conectando sus necesidades de gestión con los diferentes proveedores de soluciones innovadoras (empresas, centros de investigación, universidades, …).

La I+D+i, respaldada por un sólido ecosistema de innovación, fortalece la resiliencia y nos prepara para escenarios de incertidumbre futuros, convirtiéndose en componente vital para afrontar los retos mediante el desarrollo de tecnologías eficientes y sostenibles.

P.- Global Omnium basa su gestión en modelos inspirados por la propia naturaleza, traduciéndolos en estrategias de negocio orientadas a la eficiencia hidráulica y el «vertido cero». ¿Nos podría contar un poco más sobre esta metodología? ¿En qué proyectos concretos se refleja mejor este modelo?

R.- Efectivamente, en Global Omnium nos consideramos aliados de la naturaleza en la gestión de nuestros procesos, y no usuarios de sus recursos. La gestión sostenible del agua es esencial en nuestras estrategias de negocio y líneas de investigación. Ejemplificamos este enfoque con proyectos como LIFE RENATURWAT, financiado por la UE en el marco del Programa LIFE, cuyo objetivo es demostrar que el uso de humedales artificiales, que emplean fangos de ETAP como sustrato, como tratamiento de afino en EDAR de pequeñas poblaciones, permite mejorar la calidad del agua residual tratada, fomentando la economía circular en el ciclo urbano del agua, y renaturalizando el agua, acercándola a las características del medio acuático receptor.

Otro proyecto destacado es AiguaD9, financiado por la Agència Valenciana de la Innovació (AVI), destinado a desarrollar tratamientos avanzados para la reutilización segura del agua residual, dándole una segunda vida al agua tratada, limitando la extracción de recursos hídricos y contribuyendo a la protección ambiental y la lucha contra el cambio climático. El proyecto permitirá disponer de un “tratamiento eficiente a la carta” en función de la calidad del agua que se pretenda alcanzar, según su uso posterior: agricultura, industria, medioambiental, recreativo…

Aprendemos de la naturaleza y aplicamos esos principios en nuestras estrategias de negocio para maximizar la eficiencia del agua y reducir nuestra huella ambiental. Este compromiso con la sostenibilidad se refleja en todas nuestras operaciones.

P.- ¿Podría describir algunos de los proyectos más destacados en los que el Área está trabajando actualmente?

R.- Actualmente, nuestra cartera de proyectos refleja nuestro enfoque estratégico en I+D+i. El proyecto NIAGARA, respaldado en el programa Horizon Europe, se centra en abordar la calidad del agua, desarrollando sensores para la detección en tiempo real de contaminantes, tecnologías avanzadas para su eliminación y modelos de seguimiento de la propagación de dichos contaminantes.

En LIFE TURBINES, financiado por la UE a través del Programa LIFE, y coordinado por Global Omnium, se destaca en la eficiencia de recursos y la adaptación al cambio climático. Busca la descarbonización del suministro de agua potable mediante la implementación de turbinas para recuperar energía, contribuyendo a la transición energética hacia ciudades climáticamente neutras.

En el ámbito de la economía circular, LIFE WASTE2COAG financiado también por el Programa LIFE destaca al impulsar la simbiosis industrial, valorizando residuos de chatarra industrial y salmueras de diferentes industrias, incluyendo plantas de tratamiento de aguas, para producir coagulantes. Estos coagulantes son fundamentales para eliminar contaminantes en aguas residuales urbanas e industriales, incluyendo contaminantes emergentes y patógenos.

Cada proyecto se alinea con nuestros objetivos estratégicos en I+D+i, abordando desafíos cruciales como la calidad del agua, la eficiencia energética y la economía circular, lo que demuestra nuestro compromiso en el desarrollo de soluciones innovadoras para mejorar la gestión del agua y avanzar hacia una sociedad más sostenible.

Si bien no podemos detallar hallazgos específicos, hay avances notables en nuestros proyectos más recientes. En el proyecto LIFE ELEKTRA, financiado por el Programa LIFE, nos enfocamos en reducir nitratos en el ciclo del agua mediante desnitrificación electroquímica, convirtiéndolos en nitrógeno gaseoso. Este método innovador busca la descarbonización del proceso, aprovechando fuentes renovables como la fotovoltaica e hidrógeno, tratando aguas con alta concentración de nitratos, con el objetivo de llegar al vertido líquido cero en el proceso.

Por otro lado, el proyecto UP-TO-ME, financiado por Horizon Europe, representa una solución revolucionaria que combina la captura de CO₂ y la síntesis de metanol en una planta autónoma y sin personal. Esta tecnología promueve el uso de CO₂ de fuentes puntuales y energías renovables locales, posibilitando la producción distribuida de metanol, de manera que a pequeña escala sea económicamente viable.

P.- Para finalizar, ¿es usted optimista respecto a nuestra capacidad de afrontar la tendencia hacia la escasez de recursos hídricos? ¿Qué papel juega la I+D+i para superar este importante reto?

R.- Siempre. Tenemos que ver el agua como conector principal para conseguir los objetivos marcados en las agendas europeas, nacionales y regionales, y esto será posible siempre y cuando abordemos estos desafíos de manera integral, priorizando la innovación y la sostenibilidad.

Según el World Economic Forum, de los 10 riesgos más severos a los que nos enfrentamos en los próximos diez años, cinco están directamente relacionados con la gestión del agua, por tanto, no hay elección, debemos ser capaces de afrontar la escasez de recursos hídricos y otros retos relacionados con la gestión del agua, ya que de esta manera podremos afrontar con mayores garantías los retos globales.

Sin I+D+i será difícil enfrentar estos retos y abordar la transición hacia una sociedad más sostenible. La innovación en la gestión del agua, junto con sinergias con otros sectores, es fundamental, puesto que el agua no solo es un recurso valioso, sino también una fuente de nuevos recursos generados durante sus procesos, desde la captación hasta su retorno al medio ambiente. La economía circular y la simbiosis industrial abren nuevas oportunidades de negocio, mientras se asegura la calidad y disponibilidad del agua regenerada para sus distintos usos.